En un trabajo conjunto, en el que participan UNI 3 y la Intendencia de Durazno —a través del Departamento de Desarrollo, concretamente la División Medio Ambiente y la Sección Turismo—, se sigue trabajando en el “Plan de control de las leñosas invasoras Gleditsia Triacanthos en el Humedal del observatorio de aves”.
Ayer miércoles, en esa zona ubicada entre el ingreso al camping 33 Orientales y el puente sobre ruta 5 se realizaron tareas de reconocimiento de dicha especie.
Es importante señalar que la invasión de esta especie a nuestros montes nativos fue consecuencia de la dispersión, a través de distintas vías, desde otros ambientes. Su alta capacidad de producción de semillas, la facilidad de desplazamiento por el agua y el viento, sumado a la actividad de aves e incluso en algunos casos del ganado, favorecen su diseminación. Las condiciones propias de los suelos del bosque nativo, rico en materia orgánica y adecuado a los niveles de humedad, temperatura y sombra, proporcionan un ambiente propicio para el desarrollo de este ejemplar. Esto ha conducido a una creciente degradación de la diversidad de especies y funciones ecológicas.
Estas especies representan una amenaza para la integridad y la función de los ecosistemas y, por lo tanto, para el bienestar humano; por ello la importancia del trabajo que se está haciendo para su control.
Desde el Comité de Especies Exóticas Invasoras de la División Biodiversidad de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) se señala que “un número importante de organizaciones no gubernamentales que tienen la preocupación de preservar áreas naturales en distintas partes del territorio nacional, para lo cual desarrollan diferentes actividades, a los efectos de controlar la dispersión de estas especies exóticas invasoras y revertir el proceso de pérdida de biodiversidad. Esto evidencia cambios favorables en la valoración ambiental de los bosques nativos y otros ecosistemas y sus servicios.
A este Comité permanentemente llegan inquietudes y consultas sobre posibles acciones a desarrollar para evitar la degradación acelerada de los ecosistemas nativos. Deseamos colaborar con todas las instituciones y los organismos competentes en el tema a fin de poner en marcha actividades que permitan controlar estas especies exóticas invasoras, así como prevenir la diseminación e introducción de otras, teniendo en cuenta normas, referencias desarrolladas bajo la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria y la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora”.
Gleditsia Triacanthos
En referencia a la especie Gleditsia Triacanthos, un estudio publicado por la ingeniera Gabriela Jolochin del Laboratorio de Botánica de la Universidad de la República indica: “En nuestro país existe una especie nativa del mismo género que la especie exótica invasora: Gleditsia amorphoides, y se reconoce una variante poblacional sin espinas.
La especie exótica y la nativa son similares y podrían ser confundidas al momento de tomar cualquier acción de gestión o manejo. Sin embargo, se diferencian entre sí principalmente debido a su porte y al tipo de follaje a primera vista, y por características de sus frutos (sólo observable en las plantas femeninas).
Gleditsia amorphoides es un árbol de copa redonda y de no más de 15 m de altura (en Gleditsia triacanthos, la copa es alargada y en general las ramificaciones se dan en altura, manteniendo un fuste recto, con un aspecto más fustal), cuyo follaje es semipersistente, y en el caso que pierda el follaje totalmente en invierno lo hace por un período muy corto y sin notarse un cambio muy abrupto en el color de la época de defoliación. Los frutos (las legumbres) son similares en textura y aplanadas. Se distribuye en bosques ribereños”.
