Días pasados, en una ceremonia cargada de emotividad, quedaron inauguradas las instalaciones del Club de Niños “Tres Violetas” institución que tiene consigo mucho del sentimiento Marista dados sus orígenes.
El mencionado club fue fundado en el año 1998, ya que los hermanos Maristas tenían como preocupación la situación de muchos niños de nuestra ciudad, por lo cual se abocaron a la creación de un espacio de inclusión social para atender este tema. Es así, que, en convenio con el INAU, surge un proyecto al cual se denominó Centro Diurno San Luis y que funcionó dentro de las instalaciones del propio colegio.
Allí transcurrieron los años y pasaron muchos niños como así también equipos técnicos, funcionó en la mañana en el turno de 08:00 a 12:00 y el cupo disponible era para cincuenta niñas y niños, estos pequeños, luego pasaban becados a cursar la enseñanza primaria en el colegio en el turno vespertino hasta culminar sexto año.
Sobre el año 2018, tomando en cuenta los cambios en territorio que se dieron y dadas las demandas existentes, como así también las vulnerabilidades socio económicas constatadas y el cambio en el modelo de familia, es que, desde la institución hubo un replanteo de esta propuesta y se llegó a la conclusión de lo oportuno de abrirse a la comunidad, planteándose un proyecto con plazos a corto, mediano y largo plazo, etapas que se vienen cumpliendo.
Uno de los cambios importantes es la denominación del club, con todo lo que conlleva el nombre que le da identidad, y en un proceso participativo de alumnos y equipo técnico, es que, no al azahar se eligió el de “Tres Violetas”, ya que representan la humildad, sencillez y modestia, algo muy implicado a la identidad Marista.
Ese cambio, de cierta forma, marca una distancia del Colegio y Liceo San Luis, para que no se crea en la opinión popular que se trata de la misma institución, más allá de que en la raíz se compartan los valores que se pregonan, el colegio desde la educación formal y el club en el ámbito de la educación no formal.
Se trata de un espacio pedagógico, de recreación, deportes, conocimiento artístico, educación en valores, promoción y proyección en derechos e intercambio con la comunidad, donde asisten niños de entre 5 y 12 años de edad y que está emplazado en pleno barrio La Peyrade, sobre avenida Martín Salaberry.
