Durante la última semana de julio, el ministro de Ambiente visitó la ciudad de Durazno y señaló que es intención del gobierno nacional, en anuencia con los gobiernos departamentales, clausurar los vertederos a cielo abierto. Entonces, en el salón de actos de la Intendencia de Durazno y en presencia del intendente Carmelo Vidalín, señaló ese compromiso con fecha precisa: año 2025.
Transcurrieron unos pocos días y esta semana se informó desde Presidencia que la intención es “eliminar vertederos a cielo abierto en 2024”, por lo que se adelantan así a los plazos manejados unos días atrás.
El ministro de Ambiente, Robert Bouvier, informó que se trabaja con ocho intendencias departamentales para eliminar los vertederos a cielo abierto que funcionan en sus territorios. Desde el gobierno se prevé erradicar todos los del país, a través de un plan para el que se asignó unos 17.000.000 de dólares.
Además, se están elaborando dos decretos que permitirán regular la gestión de residuos electrónicos y de la construcción.
Bouvier indicó, luego del acuerdo ministerial con el presidente de la República, este miércoles 9, que la cartera que dirige trabaja en un plan de acción diseñado para erradicar los vertederos a cielo abierto en el país, lo que demandará una inversión de unos 17.000.000 de dólares.
El trabajo se efectúa de forma coordinada con las intendencias, a través de proyectos específicos con cada una. Hasta el momento, se firmaron convenios con ocho, a las que se destinarán cerca de 8.500.000 dólares. La comuna de Durazno es una de estas, a partir del acuerdo celebrado el viernes 28 de julio.
Distintas características
El jerarca advirtió que no todos los vertederos presentan las mismas características. “Por un lado, sus dinámicas de funcionamiento son distintas y, por otro, contienen una dimensión social que es relevante ya que hay personas que trabajan en ellos”, señaló. “Lo que se busca es incluirlas en los diferentes proyectos”, agregó.
Estas políticas son acciones definidas en el Plan Nacional de Gestión de Residuos (PNGR) que establece el camino para los próximos años. Se trata de una herramienta de planificación estratégica que apuesta a ser motor de las transformaciones en residuos para lograr el desarrollo sostenible.
El plan cuenta con 10 ejes que lo estructuran, aborda todos los tipos de residuos comprendidos en la ley n.° 19.829 e incluye la dimensión ambiental, social y económica. Además, establece los mecanismos de seguimiento y gobernanza e impulsa fuertemente la disminución de la generación de residuos y los posiciona como recursos, apostando al desarrollo de capacidades nacionales para que la disposición final de residuos no sea la base de la gestión.
Los fondos económicos son vertidos desde la cartera de Ambiente y desembarcan en los territorios.
Aportes varios
Tal como se informó oportunamente en ocasión de la visita del titular de Ambiente al centro del país, en Durazno se acordó la adecuación progresiva de los vertederos del departamento para su clausura y centralización de residuos en el sitio de disposición final, que contará con un nuevo relleno sanitario.
Los vertederos que se cierran son los de Durazno, San Jorge, La Paloma, Ciudad del Carmen, Carlos Reyles, Blanquillo y Sarandí del Yí.
A su vez, se construirá una estación de transferencia de residuos en la ciudad de Sarandí del Yí y pequeñas estaciones de transferencia en las demás localidades. En este caso se incluye en los acuerdos aportes para infraestructura, camiones recolectores o contenedores, según las necesidades.