Mientras el Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA) propone la creación de 19 dependencias regionales, que desde El Acontecer llamamos “INBA departamentales”, surgen opiniones críticas desde los profesionales que trabajan en las castraciones del departamento de Durazno.
¿Los motivos? La escasa cantidad de personas que concurren con sus mascotas a practicar la cirugía de estas y, junto con esta, la falta de coordinación entre las organizaciones a cargo, léase la comuna, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca y la ong OBA, por citar algunas.
El Acontecer entrevistó al Dr. Mario Quintero, médico veterinario que trabajó en las recientes jornadas de castraciones, que se realizaron durante cuatro días consecutivos en diferentes barrios de la ciudad de Durazno.
Desde el domingo hasta el jueves inclusive, los veterinarios estuvieron presentes en la plaza Rodó el domingo, en el centro comunitario Varona el lunes, en la sede del Club Independiente el martes, en el Centro del Adulto Mayor el miércoles y, cerrando la gira ayer, jueves 27, en Vista Linda.
Los resultados de las cuatro jornadas distan de colmar las expectativas de propios y ajenos: 136 castraciones de perros en total.
“El día que más acompañó la gente fue el fin de semana. Personalmente trabajo en varios departamentos y podemos afirmar que la gente responsable ya castró sus animales. Ahora es el turno de que los vecinos llevan las mascotas ajenas, especialmente aquellas que les causan problemas a ellos. Los van a castrar porque esos perros después causan molestias”, dijo el Dr. Quintero, médico veterinario.
Consultado sobre esta modalidad de concurrencia, afirmó que “la mayoría va con permiso del propietario; llevan sus datos inclusive porque los dueños no tienen problema en aportar su información”.
La castración de un perro callejero se puede realizar “por oficio”. Ello significa que “si están en la calle, lo puedes castrar porque un decreto así lo avala, sea el perro de raza o no”.
Sin castrar
La mayoría de los perros de Durazno y Uruguay están sin castrar. La afirmación es fácil de corroborar. Quintero se pronuncia sobre ello: “La mayoría está sin castrar. La forma de que la gente lleve sus perros sería poniéndole alguna amenaza con los planes sociales. Lo mismo pasa con la asignación, algo coercitivo. Cuando la persona sabe que le quitarán la asignación, manda a su hijo a la escuela, con los perros se debería hacer lo mismo”.
El plan de agendar futuras acciones de castración en el departamento se fijó para el 17 de agosto en El Carmen, el 20 en el Club Rampla de la ciudad de Durazno y a fines del octavo mes del año, cuatro días consecutivos, en sede a confirmar.
“Se requiere como mínimo 8 horas de ayuno de comida y agua. Hay que llevar abrigo por el frío que pasa la mascota. Luego de la cirugía, se le da un instructivo con cuidados posteriores y un teléfono para comunicarse con nosotros, en caso que así lo requieran”, destaca el Dr. Quintero en diálogo con este medio.
Respecto del procedimiento, es sencillo y breve. “Llega la persona, completa una ficha con datos a cargo de personal de la Intendencia de Durazno, luego se le da la anestesia al can, la cirugía dura no más de 5 minutos, luego son unos 15 minutos de espera y finalmente se entrega el perro al propietario, prácticamente sin los efectos de la anestesia”, explicó.
Necesidad de coordinar
La necesidad de mayor coordinación entre instituciones es algo que el Dr. Quintero sostiene a partir de su experiencia duraznense y la de otros departamentos donde se desempeña profesionalmente.
“Yo soy de acá, pero trabajo en otros lugares y acá falla la coordinación de las instituciones. Lo único que vemos es a la Intendencia y, en algunas jornadas, a la gente de OBA. En otros lugares se hace presente el MGAP, el Ministerio del Interior y las protectoras. En esos lugares es más exitosa porque hay ayuda de todas las partes”, contó.
A su testimonio le aporta cifras, las que distan en mucho de los números locales. En Rivera en 4 meses se hicieron 2000 castraciones, “trabajando en conjunto hasta con el cuartel del Ejército Nacional. Los entes ponían vehículos para trasladar a los animales. Si se unen, será más fácil”, concluyó.
El nuevo plan 2024
En la Intendencia de Montevideo, este jueves 20, el ministro del MGAP, Fernando Mattos, el subsecretario Ignacio Buffa, la directora general Fernanda Maldonado y la presidenta del Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA), Marcia del Campo, junto con la directora ejecutiva del INBA, Marcela Delgado, participaron en una nueva sesión del Congreso de Intendentes.
Carmelo Vidalín estuvo en la sesión y escuchó la forma en que la presidenta del INBA explicó los lineamientos que lleva adelante el instituto. Expresó que este se crea para articular con diversos actores de la sociedad las políticas vinculadas tanto al sector público como al privado, apostando a la descentralización.
Atender la demanda de la sobrepoblación canina es uno de los puntos más álgidos y solicitados por la sociedad al instituto.
“Apostamos al real compromiso de los gobiernos departamentales para dar respuesta a la sobrepoblación canina, la tenencia irresponsable y sus consecuencias negativas sobre la convivencia social”, expresaron desde el instituto.
Para esto se plantean políticas vinculadas a la tenencia responsable de animales. Identificación, castración y adopción responsable son algunas propuestas que plantea el instituto.
Se destaca el apoyo de los gobiernos departamentales en relación con los albergues o refugios para animales, la importancia de convenios realizados con los municipios, la Comisión de Zoonosis, entre otros.
Además, se informó que hay más de 120.000 animales chipeados al día de hoy.
Por otra parte, dan cuenta de la creación de los Institutos de Bienestar Animal departamentales, que sustituyen a la Comisión de Tenencia Responsable y Bienestar Animal (Cotryba) y comenzarán a trabajar el próximo año.
Cerrando la presentación, la directora general del MGAP resaltó que el bienestar animal es una política de esta administración y recordó que este instituto fue creado por la Ley de Urgente Consideración, como una institución “básicamente de coordinación con los actores principales de la temática”.