Hoy despedimos a un compañero que por casi 30 años ocupó un lugar muy importante en esta casa, con la alegría de que se retira a su merecida jubilación y el compromiso de atender un área tan importante para este medio, como lo es todo el quehacer cultural y la atención a quienes trabajan en ese sector tan relevante para nuestra comunidad.
Un periodista que se formó con tesón y fue un participante activo en diversas actividades culturales del departamento de Durazno. Esto lo llevó a ocupar hoy un lugar destacado en la comuna local.
Desde estas páginas lo despedimos con agradecimiento y satisfacción por dejar escrita la historia de esos casi 30 años en este medio.
¡Salud, Walter Fumero! ¡Que tengas una jubilación plena y siempre tendrás las puertas abiertas de esta, tu casa! Dirección y personal de El Acontecer te saludamos y agradecemos por el compromiso y tanto compañerismo.
El compromiso con los lectores y protagonistas es que desde el diario se trabajará para mantener esa vara tan alta que dejas por acá.
Walter Fumero: Gracias por todo
Luego de casi 30 años de labor en Diario El Acontecer, llegó el momento de escribir en estas páginas algunas palabras de agradecimiento y despedida.
En primer lugar, quiero agradecer a su fundador y director Carlos Román, quien me dio la oportunidad de descubrir una maravillosa profesión, la de periodista.
Luego, quiero dar las gracias a todos los compañeros con los que compartí estos años de trabajo, con los que aprendí muchísimo, con los que hoy están y con aquellos que estuvieron y fueron fuente de inspiración para mi tarea como periodista cultural, como el doctor Ángel Núñez Guerra, Ricardo Berrutti y Alberto Carrasco, por nombrar algunos, además de otros colegas de distintos medios de prensa.
Sin duda, una rica profesión que me permitió crecer como persona y profesional y que me mantuvo siempre cerca de la gente y de los trabajadores y trabajadoras de la cultura, quienes con su dedicación y esfuerzo siguen realizando propuestas maravillosas.
Desde que comencé a escribir en el diario, primero realizando breves crónicas de los acontecimientos culturales y después haciendo notas y entrevistas, siempre tuve un mismo objetivo: difundir. Dar a conocer al público las propuestas de los hacedores de nuestra cultura, personas e instituciones —como proyectos, espectáculos, publicaciones, investigaciones, realizaciones de todo tipo y en todas las expresiones del arte—, y apoyarlos promocionando sus iniciativas a través de estas páginas.
Y creo que al objetivo lo cumplí. Tal vez en algunos casos sin profundizar demasiado, pero sí con el gusto de sentirme parte de esos procesos creativos, que finalmente siempre necesitan de la otra mirada, la del público, para el cual trabajan, así que vaya también un agradecimiento a todos los lectores de El Acontecer.
Esta profesión también me permitió conocer a mucha gente, a destacadas figuras del área cultural y artística de nuestro país y del extranjero, pero fundamentalmente a la gente de nuestro Durazno, aquellos que sin ser tan conocidos buscan alcanzar ese lugar de reconocimiento a través de su arte.
Estos últimos, en muchísimos casos, se fueron transformando en personas cercanas y amigos, con los cuales compartimos sus iniciativas, sus sueños, y apoyamos para que estos se hicieran realidad. A ellos también quiero agradecer especialmente, por haberme permitido desde mi lugar ser parte también.
Seguramente, muchos o algunos dirán que esto no debería ser así para un periodista. Esté bien o esté mal, debo decir que nunca me lo cuestioné y que para mí sí fue así.
Todos los trabajadores de la cultura, en especial aquellos que tenemos tan cercanos, conociendo su dedicación y esfuerzo, merecen el reconocimiento de su pueblo, de su gente. Tenemos que valorar a nuestros actores culturales, a nuestros artistas; mirar más a nuestro alrededor y a nosotros mismos.
Hoy toca despedirme de estas páginas con la hermosa sensación del deber cumplido, sabiendo que lo hice con total honestidad.
Por eso, la mejor palabra que encuentro para decir adiós es GRACIAS. ¡Muchas gracias a todos!
Walter Fumero