El Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT entregó a la empresa Enkel Group, especialista en el sistema constructivo en madera Mass Timber, un listado de 300 trabajadores egresados del curso “Más Valor” en el uso de nuevas tecnologías en madera.
La importancia de este registro de trabajadores para el departamento de Durazno radica en la inminente construcción del primer edificio en altura con destino a vivienda social, precisamente en madera.
Según se anunció en la presentación, este registro se pondrá a disposición de todas las empresas del sector para los distintos emprendimientos que se realizarán en el país.
El curso “Más Valor: transformación del perfil de las y los trabajadores de la madera” es un programa que instruye en nuevas técnicas constructivas, impulsado por el Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT y financiado por el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (INEFOP), en asociación con Enkel Group.
Durante la presente semana, el Instituto Cuesta Duarte entregó a la empresa Enkel Group un listado con 300 egresados del curso, listos para trabajar cuando la demanda los necesite.
El gran potencial de la madera
Cuando el Instituto Cuesta Duarte comenzó a analizar la idea de realizar las capacitaciones, se tuvo en cuenta que el oficio del carpintero venía perdiéndose de forma paulatina. Sin embargo, la industria de la madera tiene un gran potencial ya que, en 2020, el Instituto realizó un estudio prospectivo que concluyó que los sectores de la madera, la pesca y los lácteos son los que tienen más posibilidades de crecimiento.
En tal sentido, el Instituto Cuesta Duarte, en conjunto con SOIMA y Enkel Group, desarrolló un manual de procedimientos constructivos, que fue evaluado por arquitectos grado 5 de la Universidad de la República.
Posteriormente, la primera capacitación de trabajadores en el sistema constructivo en madera Mass Timber se desarrolló en Tacuarembó, donde se capacitó a unas 100 personas.
Burgos recordó que, posteriormente, se entregaron 120 diplomas en Durazno, a raíz de que el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), lanzó una hoja de ruta para la construcción de vivienda social en madera.
Esta reciente instancia abarcó Canelones, con algo de 40 participantes.
Algo atrasado
Eduardo Burgos, integrante del Instituto Cuesta Duarte, lamentó que la Agencia Nacional de Vivienda y el Ministerio de Vivienda “no hayan cumplido con el compromiso que adoptaron en su momento y hayan cambiado las normativas técnicas, lo que ha paralizado el desarrollo de este edificio. Sigue pesando más la burocracia, y los trabajadores inscritos en la capacitación continúan sin tener posibilidad de acceder a un puesto de trabajo de calidad. Como trabajadores organizados, necesitamos desarrollar la industria nacional, porque no hay trabajo si no hay industria. En este caso, tenemos la materia prima y podemos agregarle valor. Es una lástima que el Estado no agilice los procesos y no cumpla con los compromisos, porque hay una licitación y aprobación del BID, pero seguimos esperando que se adjudique la obra”.
Aseguró que “la mejor política de inserción social es el trabajo de calidad y los salarios dignos”.
Finalmente, el arquitecto Juan José Gutiérrez, socio fundador de la empresa Enkel Group, expresó que el programa es “muy importante y oportuno” debido a que Uruguay tiene una situación muy favorable para el desarrollo de los sistemas constructivos en madera, gracias a sus abundantes bosques, que constituyen un recurso muy valioso para el país, al que es necesario agregarle valor.