Llegaron a China los toros duraznenses enviados por Uruguay, abriendo el camino para la exportación de semen y embriones al gigante asiático.
La genética uruguaya aterrizó en China con tres toros de primer nivel, enviados como obsequio del gobierno. La exportación, liderada por la empresa del Norte Agronegocios, se convirtió en un hito, siendo la primera vez que animales en pie son trasladados en avión desde Uruguay.
Desde el Aeropuerto de Carrasco, el director de la firma, Juan Pablo Helguera, no ocultó su entusiasmo: “Es un orgullo y una gran responsabilidad. Exportamos la mayor genética del país”.
El regalo, impulsado por el presidente Luis Lacalle Pou, incluyó ejemplares Hereford, Angus y Braford, seleccionados a través de un sorteo entre cabañas nacionales. Tras una cuarentena de 30 días, el embarque partió el viernes por la noche y llegó a destino el domingo.
China, un mercado abierto
La delegación china quedó impactada al recorrer los campos uruguayos y ver el ganado criado en libertad. “Se van entusiasmados con importar semen y embriones”, comentó Helguera, quien anticipa que Uruguay está cerca de concretar su primera exportación de genética bovina a ese mercado.
Por su parte, la cabaña San José del Yaguarí, responsable del toro Angus enviado, celebró la oportunidad. “Es un orgullo representar a la raza en China”, afirmó la Dra. Lucía Zerbino, destacando la calidad del ejemplar.
La pelota en cancha china
El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, encabezó la ceremonia de embarque junto al presidente Lacalle Pou, destacando la importancia del desarrollo genético para el sector.
Ahora, la decisión final está en manos de China, que debe habilitar cinco centros de recolección de material genético para dar luz verde a futuras exportaciones. “Estamos listos, solo falta el visto bueno”, cerró Helguera.
Uruguay jugó su carta. Ahora, la pelota está en China.