Mañana, por la noche, en la sala Rosina Sosa del Pequeño Teatro, la actriz Vitto Robano y el actor Nacho Revello se encuentran con el público y las tablas de su ciudad natal, presentando el estreno de su obra Quiero algo dulce.

Los profesionales de las artes escénicas nunca tuvieron la oportunidad de presentar sus trabajos en su ciudad natal. Como tantos jóvenes, viajaron a la capital del país para seguir estudiando y allí se formaron en este arte, como actriz y actor, como directora y dramaturgo, así como desarrollaron sus actividades artísticas en Montevideo.
Tras el primer encuentro de cronopios realizado en la sala del Pequeño Teatro en abril pasado, donde ambos jóvenes fueron convocados para compartir sus experiencias en el teatro, decidieron realizar una obra para presentar en esta misma sala y así compartir con el público duraznense su arte. La obra se denomina Quiero algo dulce, se estrenará mañana viernes, a la hora 20:30, y se mantendrá en cartel hasta el domingo.

Emotivo encuentro
“En realidad nos cruzamos acá con Vitto, en el encuentro de cronopios, y nos propusimos hacer algo en Durazno”, dijo Nacho. “El teatro además estaba reabierto a nuestra propuesta, nos copamos y ahí surgió esta obra”, agregó Vitto.
“Poder estar acá y mostrar parte de nuestro trabajo, para mí, es muy importante, como que siempre lo quise hacer y no había podido. Me parece además superimportante poder traer y pensar una obra de cero para un espacio de Durazno. En lo personal me toca una fibra muy emotiva, porque ser de acá me hace como vivirlo con otra intensidad todo”, dijo la actriz. “Yo me formé en Montevideo y todo lo he hecho allá. Es muy difícil también la gestión de traer un espectáculo para acá; se necesita dinero que nunca hay para moverse. Esta obra fue pensada sin recursos”, añadió.
“Es un poco irónico también”, acotó Nacho. “Uno nació en un lugar y al final pasan los años y nunca podés actuar en ese lugar… Quisimos romper un poco con ese sistema y dijimos: ‘vamos a escribir algo y lo hacemos, sin esperar que alguien nos convoque. Vamos a escribir, actuar y dirigir y lo vamos hacer para Durazno’.
Es como una cosa personal nuestra. Incluso mi familia nunca ha visto nada de lo que he hecho y seguramente a Vitto también le ha pasado. Por eso decidimos hacer la obra para acá y estrenarla acá. No sabemos qué vida tendrá. A mí me pasó que lo de la actuación me surgió a los 20 y pico y ya a los 18 me había ido para Montevideo.
La verdad ha sido relindo, entramos hoy [ayer] al Pequeño y estamos supercontentos y agradecidos de la forma que nos recibieron”, agregó.
Creación colectiva
Sobre la obra que estrenarán mañana, explicaron que en muy poco tiempo se armó, trabajando juntos, desde la escritura hasta la puesta en escena, y que contaron para ello con la participación de otros dos intérpretes: la actriz y música Alejandra Moratorio y el actor Sebastián Calderón. Vittoria participa actuando también y dirige la puesta, con la asistencia de Ignacio.
“Recién terminamos un ensayo muy lindo, y me pasó que lo veía y sentía que esos tres personajes están como exorcizando lo que les pasa, esos deseos y esa acumulación de frustraciones y de poder cumplir con los mandatos y todo lo que te pasa… como tratando de sacar para afuera todo lo que tienen adentro, los límites y demás… buscan la manera de vivir con eso y sacarlo para afuera”, dijo el dramaturgo.
Por su parte, la directora indicó que “el trabajo se fue dando en el presente de cada ensayo. Entre todos fuimos viendo las maneras de traducir estas palabras al lenguaje escénico y levantarlo. Creando un lenguaje y un universo lo fuimos encontrando; todo apareció en la dinámica de trabajo. Cuando fuimos a una sala de teatro, definimos el espacio, se levantó el universo, se concretó; fui muy intuitivo también.
La obra tiene de todo un poco: comedia, drama, misterio, que se da naturalmente porque tocamos temas que hoy en día nos atraviesan, como una insatisfacción constante, un hambre que nunca podemos saciar, el vacío, el cómo consumimos…, va a tocar puntos que el público seguramente se va a identificar”.
Ficha técnica
Quiero algo dulce. Beberaje de reflexiones. El reflujo de lo no dicho. Un balde de azúcar sobre tres cuerpos con acidez. La ilusión, el vacío y el intento por despertar de un sueño nostálgico.
Texto: Ignacio Revello y Vittoria Robano.
Dirección: Vittoria Robano. Asistencia de Dirección: Ignacio Revello.
Elenco: Alejandra Moratorio, Sebastián Calderón y Vittoria Robano.
Funciones: viernes 5 y sábado 6 hora 20:30, domingo 7 hora 19:00 y domingo 14 hora 19:00.
Entradas generales
$ 300. Socios del Pequeño Teatro $ 150. Reservas (solo WhatsApp) al 091 351 121.