Quienes asumen el compromiso y la responsabilidad de estar al frente de un medio de comunicación se vuelven obligados protagonistas también de la historia de una comunidad y referentes necesarios en esa tarea social imprescindible como es informar.
La radio ha tenido rol más que importante en Durazno, y Carmita Bonfrisco fue, sin duda alguna, una de las pioneras en crear e impulsar a CW 25 Radio Durazno, en el concierto de la radiodifusión y en el aporte a la cultura de varias generaciones de duraznenses.
En las últimas horas nos ha dejado, y momento es propicio no sólo para el recuerdo, merecido obviamente, sino para repasar algunas de las nobles iniciativas que lideró como periodista, locutora, luego directora del citado medio, y el compromiso de involucrarse, siempre creativamente, en otros emprendimientos como lo fue para los estudiantes locales por más de veinte años, en lo que denominó como el “Torneo del saber estudiantil”, un evento que concitó la adhesión de las familias y el público en general.
Preocupada siempre por inventar e impulsar actividades culturales, más allá del estudio de CW 25, supo generar oportunidades de formación para quienes nos quisimos estrenar como periodistas, creando una escuela que contó con el aporte de varios conocidos comunicadores capitalinos.
Recuerdo una de las tantas frases, muy inteligentes y creativas, con las cuales se identificaba allá por la década de los 70 la función social indiscutible de la radio, y frente al micrófono soltaba un “ Transmite Radio Durazno, el aire es nuestro”.
Carmita dejó también su impronta como empresaria y encarnó el rol de las relaciones públicas en un tiempo donde las técnicas de comercio y marketing no se habían difundido por estos lares.
Vaya el recuerdo para esta mujer que ya ocupa un lugar importante en la historia de la radiodifusión local, de la comunicación y de la cultura.











