En la ciudad de Durazno, un grupo de ayuda mutua se ha convertido en un referente en la lucha contra la obesidad y los trastornos alimentarios. La Asociación de Lucha Contra la Obesidad (ALCO), reconocida por la Organización Mundial de la Salud, brinda apoyo a personas con sobrepeso, obesidad y conductas compulsivas con la comida, así como a aquellos que simplemente desean mejorar sus hábitos alimentarios.
Desde su fundación en 1982, ALCO se ha reunido todos los miércoles a las 19:00 horas en la prestigiosa sede de la Sociedad Sirio-libanesa, en busca de un objetivo común: alcanzar equilibrio y armonía tanto en el cuerpo como en el espíritu, y vivir una vida más sana y plena.

Recientemente, el equipo de El Acontecer tuvo la oportunidad de asistir a una de las reuniones de ALCO, donde se entrevistó a varias de sus integrantes para conocer de cerca las actividades que realizan y el impacto positivo que ha tenido en sus vidas. Además, se invitó a más personas a unirse a esta enriquecedora experiencia, la cual tiene como propósito mejorar la salud y la calidad de vida de quienes participan.
Alicia Niche, elegida como coordinadora del grupo, explicó que, si bien no cuentan con una sede fija, actualmente alquilan el salón de la Sociedad Sirio-libanesa gracias a los recursos aportados por cada una de las integrantes, quienes abonan un bono colaborativo de noventa pesos por reunión. Durante las sesiones, se lleva a cabo un proceso de autoevaluación del peso, seguido de discusiones y consultas en las que todos los miembros brindan su apoyo. Además, se trabaja en base a las herramientas proporcionadas por ALCO para alcanzar los objetivos individuales.
La clave para el éxito en este grupo radica en la responsabilidad y el compromiso de cada uno de sus integrantes. No solo se espera que asistan puntualmente a las reuniones semanales, sino que también cumplan con los objetivos establecidos a corto plazo. Alicia Niche mencionó la importancia del registro de comidas, el uso de una balanza y la elaboración de una curva de peso personalizada para el seguimiento de los progresos individuales.
Silvia Peralta, proveniente de la localidad de Carlos Reyles, se enorgullece de haber perdido 21 kilos gracias a su participación activa en ALCO. Para ella, este grupo representa un estímulo y un cambio de vida significativo. Destaca el valioso apoyo que recibe de su familia en este proceso.
Gabriela Vizcaya, quien ha pasado por varias etapas en el grupo, recalca la importancia de la constancia y la continuidad en las reuniones de ALCO. Con gran motivación, destaca la camaradería entre las integrantes y el hecho de no sentirse sola en su camino hacia la pérdida de peso.
El manejo adecuado de los “créditos” y la figura de la madrina son aspectos fundamentales en ALCO. En lugar de imponer una dieta estricta, se enfatiza el control de las porciones y las negociaciones con los alimentos habituales. Rosario Bonfrisco, ex coordinadora del grupo, explicó que cada participante personaliza su plan de acuerdo a sus preferencias, aprendiendo a equilibrar los “créditos” asignados diariamente.
Entre las integrantes destacadas se encuentra Shirley Silva, conocida cariñosamente como “Chela” y considerada la madrina del grupo. Desde 1982, ha sido un ejemplo de perseverancia y compromiso, demostrando que la constancia es fundamental para alcanzar los objetivos individuales y mantenerse en el camino hacia una vida más saludable.
Para aquellos interesados en unirse a esta experiencia transformadora, las reuniones se llevan a cabo los miércoles de 19:00 a 20:00 horas en la sede de la Sociedad Sirio-libanesa, ubicada en la calle Eusebio Píriz 744. Además, pueden obtener más información escribiendo al correo electrónico alco@durazno.gub.uy o visitando la página de Facebook “ALCO Durazno”. No pierdas la oportunidad de mejorar tu calidad de vida y unirte a este grupo de ayuda mutua en la lucha contra la obesidad.











